En la compra de ventanas es necesario tener en cuenta la calidad y especificaciones técnicas del producto, además del estilo y el diseño del proyecto. Y a veces, puede resultar complicado debido a los diferentes tipos de ventanas que hay.
Algunas personas dicen que una buena calidad de vida es tener un horizonte bonito al que mirar. Y, para tenerlo en casa, esa necesario que haya una ventana que enmarque el paisaje. A la hora de elegir, el diseño arquitectónico debe estar bien definido, para que el material sea exacto. En el producto, es necesario verificar si las partes se deslizan con facilidad, si hay simple o doble acristalamiento, así como espacios donde puede entrar el viento. Además, es necesario distinguir las debilidades de perfiles huecos y más resistentes.
Tipos de ventanas
Cada caso es único y requerirá un tipo de producto, dependiendo de la necesidad de aislamiento acústico o del frío, así como un refuerzo en edificios más grandes que reciben vientos más fuertes. Para ello, necesitas prestar atención a la calidad y las especificaciones técnicas, el estilo y el diseño de cada proyecto.
Hierro
Es común en edificios más viejos las ventanas de hierro forjado. Con la ola de la modernización, y la recuperación de la arquitectura original de edificios urbanos al igual que en el mobiliario de oficina, los marcos de hierro tienden a permanecer. Aquí, el cuidado es más pequeños que en el caso de la madera: aplicar anticorrosivos y hacer pinturas anuales, evitando la acumulación de corrosión (oxidación). El acero es tres veces más resistente que el aluminio y permite la producción de perfiles muy delgados, que pueden dar lugar a ventanas con diseños más audaces.
Aluminio
Por otro lado, las ventanas de aluminio se encuentran en varias líneas, con espesores de perfiles con diferentes niveles de calidad. El más robusto es bonito, resistente y bien estructurado. Las estructuras más firmes, necesitan mayores vanos. Cuando eliges ventanas de perfiles muy delgados, más baratos, no resulta posible cubrir grandes espacios porque se pueden deformar. Cuanto mejor están estructurados los marcos de las ventanas, mayores pueden ser. Será más caro, sin embargo.
Madera
Las ventanas de madera disponen de líneas arquitectónicas más rústicas, que buscan una mayor interacción con la naturaleza, como en las villas. El mantenimiento, sin embargo, es anual. Necesitarán pintar y lijar de forma adecuada, ya que la madera es un material que es más sensible a la humedad. Esta se dilata con la humedad y se contrae cuando el aire es más seco. En casas de playa, el cuidado es aún mayor, porque aumentan los niveles de humedad. En la compra, asegúrate de que la madera está seca.
PVC
PVC (cloruro de polivinilo) tiene buen funcionamiento termoacústico y es robusto. Es ampliamente utilizado en edificios nuevos en las grandes ciudades, donde es importante que el material de las ventanas ayude a proteger contra el ruido de la calle. A prueba de calor, las ventanas de PVC reciben pintura electrostática, así como los marcos de las ventanas de aluminio, que lo hacen fácil de limpiar. En ambos casos, el mantenimiento es mucho menos intensivo y el final es más duradero que la madera y el acero, ya que los materiales resisten más humedad.
En cualquiera de los tipos de ventanas, que definirá el modelo de esta se deben tener en cuenta las posibilidades que se presentan en la arquitectura. Vale la pena recordar que, frente a edificios residenciales, a menudo hay un patrón a seguir, y no hay escapatoria. En el mercado, es normal encontrar marcos de corrientes, ventanas con persianas, combinando con el cristal o tipo guillotina. En la elección de los materiales, no se debe mezclar la madera con el PVC y el aluminio: debe ser una clase de material para toda la construcción.
Por último, más importante que el material en sí mismo es la elección de la mano de obra. La ventana debe sellar, proteger del viento y detener el agua de lluvia. Debe estar muy bien hecho el trabajo, y se debe comprar en una tienda, fábrica o conocido artesano cuyo producto dé la garantía y presente los materiales de calidad.
Pros y contras de los tipos de ventanas
- Hierro y acero: son súper resistentes, pero necesitan un constante mantenimiento para evitar la corrosión. También se requiere aislamiento eléctrico y la inversión en obras.
- Madera: ideal para ubicaciones que requieren un mayor aislamiento térmico. Deben tener mantenimiento constante para evitar daños por humedad, luz solar y las termitas al igual que cualquier mueble a medida de este material.
- Aluminio: se destaca por su fácil mantenimiento y resistencia a la intemperie. No se oxida, es ligero, económico y fácil de diseñar y ejecutar. Sin embargo, no se recomienda para todos los entornos.
- PVC: es duradero, fácil de mantener y proporciona gran aislamiento. Sin embargo, puede desgastarse y no es recomendable en zonas de clima más intenso con la lluvia y el viento, por ejemplo.
